Con respecto a la generación anterior, la quinta generación de la CR-V es más grande, más cómoda y tiene una estética totalmente novedosa que sigue la línea de los últimos modelos de la marca. ¿Contras? Una única versión tope de gama con un precio altísimo.
La CR-V es uno de los modelos más exitosos de Honda en Argentina. Las generaciones que se vendieron en el país fueron un “boom” de ventas cuando la marca japonesa lo quiso. ¿Por qué cuando quiso? Hace unos años que el grupo japonés decidió poner todas sus fichas al mercado de las motos en el país. Su fábrica produce varios modelos de dos ruedas y algunas HR-V que se exportan al Mercosur.
Con esta propuesta, la gama de Honda Autos en Argentina empezó a mermar y ahora sólo quedan tres productos con escasas unidades para vender (Civic, HR-Vy CR-V). Así fue como la firma japonesa pasó de ser una referente en el mercado a tener grandes productos pero con pocas variantes y precios elevados.
Una única versión en el mercado argentino.
Foto: Honda
La nueva CR-V es uno de los ejemplos más claros de este cambio. La quinta generación del SUV de Honda, que comenzó a comercializarse hace unos meses, tiene características y condiciones para volver a ser una de las referentes del segmento pero su única versión disponible, la tope de gama, tiene un precio que asombra.
Diseño Exterior
Al igual que el Civic, la CR-V tiene un diseño imponente pero que mantiene la elegancia habitual de los modelos de Honda.
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Claramente, es más deportiva y llamativa que los modelos anteriores. Tiene líneas más angulosas y menos rendondeadas, una amplia parrilla frontal que “incorpora” a los faros delanteros con Full Led, una marcada línea de cintura y unas llantas de aleación de 18 pulgadas con neumáticos Hankook 235/60. Con las grandes novedades que hay en el segmento de los SUVs, el CR-V puede compararse con un Peugeot 3008 que también se destaca por su particular estética.
Motor turbo y caja automática CVT.
Foto: Honda
El techo cuenta con barras, tiene un pequeño alerón para darle un toque más deportivo y la parte trasera tiene un amplio y recto portón automático con faros bipartitos. Los antinieblas están colocados en la parte baja del paragolpes.
En cuanto a su antecesor, creció en todas sus dimensiones y se nota. Tiene un largo de 4.587 mm (+58mm), un ancho de 1.854 mm (+35mm) y un alto de 1.689 mm (+35mm). A su vez, la distancia entre ejes llega a los 2.659 mm (+40mm).
Diseño Interior
Siempre se caracterizó por ser un modelo confortable. Ahora, con las nuevas medidas, todo pasó a un nuevo nivel. Los pasajeros delanteros cuenta con butacas amplias con regulaciones eléctricas y memorias y los traseros tienen un amplio espacio para las piernas, cabeza y hombros. Mi hijo, con la silla infantil colocada en los Ganchos ISOFIX, iba tan alejado de la primera fila de asientos que hasta parecía que estaba en otro auto.
La calidad de los materiales es buena pero mantiene el estilo “señorial” de los modelos de Honda.
Foto: Honda
La posición de manejo es como todos los SUVs: alta con buena visibilidad. Es para destacar la posición de la selectora que está al alcance de la mano. Las cinco plazas son verdaderamente cinco plazas. Todos van cómodos y tienen espacio para guardar su bolsito porque el baúl cuenta con un volumen de 646 litros. Además, el auxilio que está guardado ahí es similar a los cuatro neumáticos que están rodando.
El diseño del interior puede ser mejorado. Mantiene las características habituales de los productos de Honda con las terminaciones de plástico que imitan a la madera y una consola central bastante confusa con una pantalla multimedia de siete pulgadas con Apple Car Play y Android Auto. Al igual que la HR-V, este producto cuenta con su conexión a Internet.
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Tiene un gran espacio interior.
Foto: Honda
La calidad y terminaciones de los materiales son de excelencia y el equipamiento de confort está al nivel de lo que ofrece en el segmento. Teniendo en cuenta que es un modelo tope de gama, dispone de: cuatro puertos USB, techo corredizo, el head-up display (confieso que no me gusta para nada), monitor de la distribución de torque, acceso inteligente sin llave con botón de encendido, freno de mano eléctrico y espejo interior automático. Además, las butacas y la palanca de cambios está revestidas en cuero.
Motor y Confort de Marcha
La CR-V cuenta con el moderno 1.5 turbo (también lo equipa el Civic) con inyección directa que desarrolla una potencia máxima de 190 cv y un torque de 240 Nm, entre 2.000 y 5.000 rpm. Esta única versión que se comercializa viene combinada con la caja automática con variador continuo (CVT con siete marchas preprogramadas y levas al volante). La tracción es 4×4 con acople automático.
La posición de manejo es muy cómoda.
Foto: Honda
A gusto personal, el turbo le cae a la perfección a la CR-V. Por supuesto que en los primeros metros, sin el turbo acoplado y la perezosa caja CVT, sentís algo de sueño pero el despertador suena cerca de las 2000 rpm. Con el turbo en acción las mejoras son sustanciales. Tiene buenas reacciones a la hora de los recuperos y el motor trabaja a bajas revoluciones para mejorar el consumo. En el ciclo mixto (ciudad y ruta), después de 500 kilómetros, arrojó unos 9,9 litros cada 100 kilómetros.
La suspensión tiene un buen recorrido (especial para nuestros caminos) y las neumáticos son de un perfil bastante alto para mejorar el confort. Todo el confort dinámico está pensado para la ruta y los viajes largos.
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Poco habitual en este tipo de modelos, la CR-V es 4×4. Dispone del acople automático que está pensado para un off-road liviano. Seguramente si te metes en un camino con mucho barro te vas a quedar enterrado salvo que seas Sebastien Loeb. El SUV no está desarrollado para ser un vehículo de trabajo, sino para ser un modelo que se disfrute en familia en la ruta y que te de la posibilidad de ingresar con mucho cuidado a caminos alternativos. El ESP se puede desactivar en un 100%.
Para mejorar el manejo de todos los conductores, la Honda CR-V equipa el AHA (Agile Handling Assist), un sistema que funciona antes del control de estabilidad (ESP) para “corregir” el trazado del piloto en las curvas.
Es el diseño exterior más osado de todas las generaciones de la CR-V.
Foto: Honda
Equipamiento y Seguridad
Es completa para el segmento pero siendo un modelo tope de gama le tenemos que exigir un poco más. En cuanto a seguridad, equipa seis airbags, frenos con ABS, distribución electrónica (EBD) y asistencia de frenado (BA), monitoreo de presión de neumáticos, asistencia al arranque en pendiente, detector de fatiga y cámara de punto ciego en el retrovisor derecho.
Por ejemplo, la Peugeot 3008, un competidor nato para este modelo aunque no sea 4×4, tiene un equipamiento mucho más completo.
Conclusión
Importada de Estados Unidos, la CR-V tributa el 35% de arancel aduanero y el valor de comercialización se fue por las nubes. El $1.360.000- que cuesta en Argentina puso al producto de Honda en comparación con los modelos más grandes y ahí empiezan a “mermar” sus características con respecto a sus nuevos competidores.
No hay discusión que la quinta generación de la Honda CR-V tiene un buen diseño, un interior comodísimo y una comportamiento dinámico de excelencia para la ruta. Dentro de las contras se puede nombrar su equipamiento pero ese seguramente ese cuestionamiento viene por el valor que tiene en el mercado.
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