El nuevo deportivo británico Artura de McLaren cambia el paradigma gracias a la llegada de la movilidad híbrida.

Y un día McLaren presentó su primer modelo de producción en serie híbrido para acoplarse al resto de la gama como un vehículo distintivo.

Con respecto a su estética, respeta el estilo de la marca con las formas de la carrocería el diseño de los faros y las dos salidas de escape a media altura.

Los neumáticos Pirelli P-Zero acompañan con las llantas deportivas y por detrás de ellas figuran los frenos de alto rendimiento.

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El interior del McLaren Artura difiere un poco a lo acostumbrado en otros modelos de la compañía.

Su volante se encuentra despojado de comandos que se han reubicado sobre la consola. La pantalla central orientada al conductor permite que el mismo no se distraiga.

Por otro lado, los técnicos de McLaren emplearon la nueva arquitectura de carbono MCLA de elaboración propia. A su vez, su carrocería ligera cuenta con aluminio y fibra de carbono.

El motor tradicional de combustión es un V6 biturbo de 3.0 litros del cual se exprimen unos 585 caballos de potencia.

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Trabaja en sociedad con otro impulsor eléctrico de 95 CV. Ambos logran un caballaje combinado de 680 CV.

Claro que también se añade la batería de iones de litio de 7,4 kWh que puede recargarse un 80 por ciento en dos horas y media.

Todo el conjunto del McLaren Artura culmina con la caja de velocidades de doble embrague automática SSG con ocho relaciones. Sólo le toma 3 segundos alcanzar los 100 km/h con partida detenida y su velocidad máxima es de 330 km/h.

El consumo según ciclo WLTP está estipulado en 5,5 litros cada 100 kilómetros y puede recorrer 30 kilómetros en modo netamente eléctrico.

Sobre cuestiones de seguridad se suman los asistentes de mantenimiento de carril, reconocimiento de señales de tráfico, luces largas automáticas o control de crucero adaptativo.

Como parte de una revolución para McLaren, el Artura inicia una nueva era.