La firma gala ha dado a conocer la nueva generación de este modelo que abandona su clásica denominación además de sumar flamantes mecánicas y confort.
Frontal similar a los últimos lanzamientos de la marca. Foto: Peugeot
Al igual que la tercera generación de la Citröen Berlingo develada días atrás, Peugeot ha hecho lo mismo con su hermana Partner para lucirla en una nueva edición del Salón de Ginebra. Más allá de su renovación, el particular detalle es que deja de lado su nombre para darle la bienvenida a su nueva denominación, Rifter.
Desarrollada sobre la plataforma EMP2 y al igual que la Citroën Berlingo se ofrecerá por pirmera vez con dos medidas de carrocería, con una longitud de 4,40 metros o de 4,75 m para 5 o 7 plazas respectivamente. Posiblemente luego de su presentación llegará la opción Furgón para el transporte de mercaderías.
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En tanto, el diseño exterior de la Peugeot Rifter se muestra con un amplio paragolpes y unos faros y parrilla similares a los modelos 3008 y 5008, por mencionar algunos productos del león. Además ofrece una protección plástica que recorre los laterales (sobre las puertas y pasos de rueda) y suma las barras portaequipajes en el techo. Los grupos ópticos traseros también han recibido modificaciones y ahora cuenta con la apertura doble del portón.
Dentro del habitáculo, la Peugeot Rifter incluye la corriente i-Cockpit con la ubicación del tablero más elevada y un volante multifunción más compacto. Su colores oscuros para los asientos y paneles de puerta le aportan un ambiente sobrio. Además incorpora la pantalla multifunción de 8 pulgadas con Mirror Link, Apple CarPlay y Android Auto, entre otros dispositivos.
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En materia de seguridad, la Peugeot Rifter posee sistemas que ayudan al conductor como el frenado automático en ciudad a velocidades bajas y detección de ángulo muerto. También añade la cámara de visión trasera para maniobras de estacionamiento y el alerta de cambio de carril, como más relevantes.
Por otro lado, la mecánica de la Peugeot Rifter está compuesta por alternativas nafteras o diésel. En cuanto a la primera se puede encontrar al 1.2 Puretech de 110 y 130 caballos de fuerza y la segunda el 1.5 BlueHDi. De 75, 100 o 130 CV Ambas variantes se pueden asociar a una transmisión manual de 5 o 6 velocidades o una nueva automática de 8 relaciones.
Así, la Peugeot Rifter aguarda por el inicio del Auto Show suizo para luego desembarcar en el viejo continente. Por el momento su llegada al país es incierta.
MATÍAS MURO