El SUV-coupé de la marca alemana ya se comercializa en Brasil y podría llegar en breve a la Argentina. El Mercedes-Benz AMG GLE posee un motor 4.0 V8, turbo de 612 CV y 843 Nm de torque.
El Mercedes-Benz AMG GLE 63 S 4Matic + Coupé llega a Brasil para completar el portafolio de SUV de la marca. Ofrece toda la deportividad de Mercedes y su división deportiva.
Además del diseño renovado y un generoso equipamiento de serie, lo más destacado del modelo son los dispositivos para ayudar a la conducción autónoma. Su motor es un 4.0 V8 biturbo con 612 caballos de fuerza y un asombroso 843 Nm de torque de 2.500 a 4.500 revoluciones por minuto.

El impulsor está acoplado a la transmisión AMG Speedshift TCT 9G y está equipado con un alternador de arranque EQ Boost integrado. Combina el motor de arranque y un alternador en un único y potente motor eléctrico integrado de forma compacta entre el propulsor y la transmisión. Los 254 Nm adicionales de torque proporcionados por el EQ Boost permiten características de aceleración únicas. Este componente que alimenta el sistema eléctrico de a bordo de 48 voltios se utiliza como generador de energía y también realiza funciones híbridas. Esto incluye impulsar, recuperar, cambiar el punto de carga y un reinicio prácticamente imperceptible del motor con la función de arranque y parada. El SUV-coupé acelera de cero a 100 en 3,8 segundos y puede alcanzar una velocidad máxima de 280 km / h, limitada electrónicamente.
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Para mayor eficiencia, Mercedes-Benz AMG equipó al motor V8 con el sistema de desactivación de cilindros. Cuando se encuentra en un rango de aceleración constante, los cilindros dos, tres, cinco y ocho se neutralizan para reducir el consumo de combustible. Cuando el conductor selecciona el programa “Confort”, el sistema de desactivación de cilindros está disponible entre 1.000 a 3.250 rpm. La transición entre estos dos estados operativos es inmediata y con par neutro, para que los pasajeros no pierdan comodidad.

El nuevo Mercedes-Benz AMG GLE 63 S Coupé posee una parrilla del radiador estilo Panamericana, específica para la división deportiva de la estrella de tres puntas.
La silueta elegante y llamativa del SUV-cupé contribuye a una apariencia segura, con líneas de diseño que transmiten claramente la pasión por el rendimiento. El parachoques delantero tiene un diseño dinámico “Jet-Wing” y está pintado en el color del vehículo con tomas de aire negras. Los pliegues del capó, las llantas de 22 pulgadas, el nuevo spoiler trasero y el escape especial AMG enfatizan su vocación deportiva. Como parte del equipamiento de serie, el paquete AMG Night añade cristales tintados con aislamiento térmico, acabado de spoiler delantero y trasero, inserciones de faldón lateral, cubiertas de espejos y marco de ventana negro.

El aspecto típico de AMG continúa en el interior del Mercedes-Benz AMG GLE 63 S Coupé, que se caracteriza por un entorno dinámico y exclusivo. Los asientos están tapizados en cuero napa, con soporte lateral y con un patrón específico con el emblema “AMG” en los respaldos delanteros. Además de los cinturones de seguridad grises y costuras en contraste en los asientos gris plateado. La iluminación ambiental individualmente ajustable también forma parte del equipo estándar.

Las teclas del volante tienen ajustes rápidos de parámetros relevantes para una conducción más dinámica. La consola central incluye una unidad específica con interruptores adicionales que se utilizan para regular el control electrónico de estabilidad de tres etapas. Asimismo, maneja el modo de transmisión manual, el sistema de amortiguación adaptable, el sistema de escape AMG Performance y la altura del vehículo.
Fuente sobre el Mercedes-Benz AMG GLE: Agencia Automotrix
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