La evolución de la salvaje pickup ostenta mejoras en muchos aspectos. La Ranger Raptor II resiste las exigencias brutales y los caminos más hostiles.

El lanzamiento de la Ford Ranger Raptor II sugiere una evolución altamente positiva para esta pickup, que ya desde su concepción se muestra robusta y desafiante.

En esta nueva generación de la Raptor mejoró en casi todos los aspectos, lo que la hace, básicamente, una pickup diferente a la anterior.

Ahora, con chasis reforzado y una suspensión que posee amortiguadores Fox Live de 2.5 pulgadas, el desempeño off road logró un upgrade altamente positivo.

Pero sin dudas, lo más notorio (no quiere decir que sea lo mejor), es el motor. Con caso 400 caballos de fuerza (397 CV) la Ranger Raptor II es la pick up mediana más potente del mercado local. A eso se le suman los 583 Nm de torque para que esta Ranger desarrollada, en parte, por Ford Performance tenga un comportamiento frenético.

Otro equipamiento que realza el estándar de la Ranger Raptor II se centra en la tracción. Ahora, el modelo posee la opción 4×4 automática, que se suma a los modos todoterreno de alta y baja.

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Por otra parte, una selectora permite elegir entre siete modos de manejo y tres sub modos:

Normal: Proporciona una combinación equilibrada de confort y manejo para la conducción diaria.

Deportivo: con rendimiento de manejo y respuesta mejorados, el sistema del tren motriz mantiene las marchas bajas durante más tiempo, ayudando a que el vehículo acelere con mayor rapidez.

Resbaladizo: Diseñado para condiciones menos favorables, donde la superficie esté cubierta de material suelto o resbaladizo; reduce la respuesta del acelerador y optimiza los cambios de marchas.

Barro/Surcos: mejora el rendimiento del vehículo para recorrer terrenos con barro o surcos, ayudando a los neumáticos del vehículo a no perder agarre.

Arena: Diseñado para un manejo todoterreno en arena o nieve profunda, proporciona cambios ascendentes retrasados en todas las marchas para evitar que el vehículo se atasque.

Rocas: este modo optimiza la respuesta y ajusta puntos de cambio de la transmisión para brindarle control adicional al vehículo.

Baja: optimiza el control del acelerador para una mejor respuesta y entrega de par, en conducción off-road de alta velocidad.

Adicionalmente a estos modos de conducción, la nueva pick-up de Ford permite crear una configuración personalizada guardando los siguientes ajustes:

Escape: silencioso, normal, deportivo o baja.

Dirección: normal, deportivo o confort.

Suspensión: normal, deportivo o todoterreno.

Por último, y como “bonus track”, se puede cambiar el sonido del caño de escape, para alcanzar una experiencia sin igual para cada tipo de conducción.

La evolución de la Ranger Raptor II es, sin ninguna duda, un salto de calidad.